MI AMOR

Mi amor me despierta en susurros, de madrugada, hambriento, voraz, con ganas de mí. Hace que me hierva la sangre, que mi cuerpo entero vibre a su antojo, me vuelve ciega, , me desorienta totalmente. Me corre por las venas.
Nunca dejo de pensar en él.
Está conmigo casi desde que existo, compartiendo todo lo que el camino de la vida significa, una vida de montaña rusa junto a él, haciéndome luchar, salir adelante. Me ha enseñado caminos que jamás hubiera descubierto sin él, me ha hecho ver las cosas a través de su particular lentilla, por lo que aun cuando le odio de verdad, cuando me gustaría sacarle de mi vida para siempre, le amo. Y le cuido. Y me aferro a ello en tiempos difíciles, como si fuera el único motivo que tengo para seguir estando cuerda, para ser racional.
Mi amor, jamás me ha dejado sola, ni me dejará. Incluso después de muerta, si no es él mismo el que me acompaña al dulce sueño para siempre, seguirá estando conmigo, seguirá siendo la sangre de mis venas, secas y putrefactas. 
Lo amo, es tan parte de mí que no podría odiarlo más de cinco minutos seguidos, porque el sólo hecho de pensarlo me destruiría.
Ha habido otros, pero él ha permanecido siempre, a veces incluso celoso me ha robado el tiempo de los demás, y yo se lo he permitido, porque es el único compañero que jamás podré abandonar. 
Mi amor se extiende más allá de toda comprensión humana. Pocas personas podrían escoger para sí un amor tan dañino y hacer de él su compañero de viaje.
Pensaréis que mi amor es enfermo. Lo es. Mi amor es mi diabetes.

Comentarios

Marta ha dicho que…
Simplemente genial :)

Entradas populares de este blog

La de la esquina doblada

cómo se aprecia

Bisolvón antitusivo, el jarabe que más me pone!!