MaS

¿Qué pensarían los hombres, padres, hijos, primos, cuñados, hermanos, abuelos, jefes, y demás masculinos singulares cercanos ante tal panorama de flacideces? Celulitis, tangas mal puestos, pechos caídos, varices, piernas sin depilar, michelines, culetes blancos... y tanta miseria corporal ante la palida luz de fluorescente que no perdona... temerían del mundo los hombres, del paso del tiempo que imperdonable atraviesa el cuerpo de sus cuidadoras sin piedad... temblarían un momento las barbillas ante tanta belleza... temblarían los corazones ante tanto olvido por una misma y crecería el amor a la mujer por metro cuadrado... no hay nada más bonito que las miserias carnales que hablan del amor a los demás y que se ven de reojo por los bajos del holiday gym las mañanas de los inviernos.

Es llegar y pensar que hoy lo doy todo, a los diez minutos que tal vez no deba volver todos los días, que mejor uno sí y uno no... a los 20 minutos mejor estas cosas sólo una vez a la semana no sea que... y a la media hora estoy deseando que eso se acabe cuanto antes porque una vez baje el culo de ahi... ya me han visto... para presumir hay que sufrir que dice la loca... Violada por una ergo technics y sudando la gota gorda decido que esto no es para mí...una decisión tardía para la pasta que me he dejado ya. Pienso que al menos valdrá la pena si al final encuentro al dichoso Mario...pero pasa otro día y no hay ni rastro...y además cómo reconocerle entre tanto chico de espaldas dando pedales. La vida es sabia me digo...el tiempo pone a todo el mundo donde se merece...y yo me merezco estar a su lado... Poco a poco siento que se convierte en un sueño... uno de esos que se sueñan por casualidad y te dejan con ganas de dormir para siempre. Dejo de luchar a pasos grandes para no hacerlo ni

No me interesa tu mundo ni me interesa tu gente. Puede que a veces le tome cariño a alguien, pero casi siepre es como tomarle cariño a una tortuga acuática: puedes observarla al sol de la terraza pero no puedes sentirte acompañado por ella, ¿me sigues? Yo no necesito a nadie; tú sí, tú necesitas a un público que te admire, espejitos que reflejen las distintas facetas de tu grandeza: mujer, hijos, amante, padres, amigos, clientes, empleados, viajar en primera, ganar medallas, tocar a Debussy, conducir un Lotus, satisfacer sexualmente a las mujeres. Yo no: ¿y sabes por qué?, porque la única manera en que el común de la gente puede admirar es sólo uan forma velada de envidia, y yo no quiero que me envidien: me da asco, me da vergüenza, me repatea, ¿te enteras? Y te voy a decir más: es posible que durante un tiempo sí estuviera enfermo, enfermo de soledad, como el Patito Feo o como un neanderthal erguido y lampiño en un mundo de cromagnones; tan enfermo que incluso llegué a recorrer el mun

Estaba yo pensando en ir encontrando un compañero sentimental que me arrope, que me cuide, que me mime y que me quiera, me acabas de quitar las ganas sin saberlo, trayendome a la mente la otra cara de la moneda: la de tener que dar denasiadas explicaciones, sentirse culpable por cosas que de lo sencillas rozan el absurdo, no poder hacer lo que me venga en gana cuando me venga en gana y obligarme a mí misma a renunciar a las cosas que sin ser demasiado importantes en cambio constituyen mi vida que a su vez está hecha de esas pequeñas cosas. Pos no hoy ya tampoco tengo ganas...

Ahora que me han pintado el cielo de gris otra vez y ha desaparecido el sol de invierno que mira por donde aquí sale más a menudo... me encantaría protestar por algo que siempre he querido. Yo, la que si acaso una capucha, la que salta en los charcos y se moja los pies, adicta a los besos bajo la lluvia, la que levanta la cara a las nubes y disfruta con su goteo, fan del "Cantando bajo la lluvia" de los años 50... Denuncio los paraguas que desfilan por las calles tiñéndolas de color y sacándonos los ojos a los que decidimos por A o por B mojarnos de arriba a abajo. Señora, señor, damas y caballeros, si no saben hacerse responsables de sus paraguas aguas guas guas (umbrellas ellas ellas las las las) hagan el favor de no sacarles de casa, disfruten de un lavado gratuito (que a más de uno le venía de perlas) y dejen de incordiar al personal amenazando la sanidad ocular pública...

Lo peor de este final no serán los puntos suspensivos como en tantos otros...yo decido si la relación seguirá adelante aunque sea a intermitencias y a reverencias... a sufrir toca... Lo peor es tomar la decisión correcta después de haber tomado todas las incorrectas...(¿cómo retomar el camino cuando no se ni dónde coño estoy?) Lo peor son las inclemencias temporales del alma que se rebela contra no se el qué ni se quién. Lo peor es el Y SI delante de todo lo que nunca quise escuchar, decir, pensar detenidamente...ASUMIR. Lo peor es el rencor conmigo misma por las horas muertas, el tiempo perdido, tantas madrugadas, tanto frío... Pero lo peor sin duda es la decepción, la de los demás que ,bien pensado, nunca me ha importado lo suficiente como para agotarme las neuronas de esta cabeza de chorlito; o aún mucho peor la mía propia conmigo misma debatiendo eternamente lo que era, soy y seré, o lo que siendo me lleva a un seguiré siendo o definitivamente pasará a ser un era para ser un nuevo