MaS

Un tiempo exquisito en la calle. Corre el aire y se está de lujo. Se ha terminado el calor angustiante. Ha llegado el Agosto de Castilla. El del fresco a las ocho de la tarde. Me deprime ver caer el sol. Antes era el mejor momento del día: la noche la fiesta la aventura. Incluso cuando éramos as pequeñas trepábamos allá arriba y nos encaramábamos a la última piedra para ver cómo la tierra se comía su naranja diaria. Ahora no lo soporto. Me angustia tanto...

g racias a todos y todas... Extiendo anticipadamente un guiño coqueto para ellos (sabiendo que esto no lo lee mi amado porque es un vago de los blogs) y un par de besos cariñosos para ellas, que son de las pocas que aún me tienen en cuenta. No ha sido fácil este último año...me voy dando cuenta de que me quedo atrás mientras todo se moderniza. Hay que estar al día de las redes sociales amistosas,(tuenti, facebook...) y amorosas (meetic, tencontré, badoo...) porque el pichón se echa a volar en cuanto sopla el viento. Esto no es vivir, me repito casi todos los días que me levantó para ir a un trabajo en el que me tengo que andar con mil ojos no porque sea peligroso sino porque a la mínima te la clavan. Yo que nunca he sido de competir porque siempre he pensado que a la única a la que debo demostraciones de mi grandeza es a mí misma, me veo envuelta en una lucha de clases por ser la más mejor sin querer en realidad destacar porque no soy vanidosa y sí un poco perezosa en lo que a pi

Vale por un fin de semana, es soportable hasta por una semana, incluso semana y media poniendo mucho una de su parte y teniendo que respirar hondo unas cuantas veces. Pensamientos como ya no formo parte de este equipo o ¿qué pinto yo aquí? serán con probabilidades comprendidas entre el 80% y el 99% muy altas y en caso de deficiencia mental grave, insignificantes. Ojo que no estoy llamando tontos a los que se sientan como pez en el agua en el regreso al nido maternal, pero que esperen un par de días más y van a probar lo insoportable del lento transcurrir del tiempo, vamos que no van a ver el momento de volver a hacer las maletas y marcharse.. ¿Qué pasó con el tiempo cuando salí por esta puerta, la misma por la que entro ahora, cuando contaba 18 veranos? el tiempo se quedó estancado, no para la gente que se quedó que continuó con su vida, ni para la gente que se marchó que aprendió miles de cosas fuera de casa por las buenas y por las malas, sino para la puerta en sí. La dichosa pue