Muiños 2008

En estos 10 días:
He conocido 57 pequeños y grandes angelitos con cuernos y tridentes.
He intentado predicar con el ejemplo para demostraros que hay que vivir CON diabetes y no PARA la diabetes.
Tengo un máster en pinchazos de día, de tarde y de noche, en el dedo, la mano, la espalda y hasta en el culo.
Casi consigo contestar a cada una de vuestras preguntas y atender vuestras peticiones.
Sobreviví al virus.
Me he licenciado en vomitología y sustos varios con Araceli.
He aprendido que el ARN recombinante es aliño para ensaladas.
Sé por qué teneis el azúcar tan alto: en realidad sois los niños más dulces del mundo.
Ser diabético es ser algo quejica, tener una escusa para no hacer actividades y tener derecho a atiborrarte a galletas alguna vez, pero también es ser responsable, cuidadoso y estupendo. Es una oportunidad para mezclarse con todos vosotros y empaparme de esas ganas de disfrutar de lo dulce y lo salado de la vida.
He dirigido con vosotros una expedición exitosa al otro lado del charco y en piragua.
También he practicado otras modalidades como el body painting en horario nocturno o la carrera de obstáculos en la habitación 8 en los turnos de guardia.
Me tumbé a descansar en la cama de algún acampado en los trayectos de la Brigada del Zumo, compañía fundada con la ayuda de Paula, Araceli, Alba, Fran y Javi, con el único fin de velar por vuestros sueños (un aplauso para todos los monitores de guardia de la habitación de los chicos).
Reconozco que me encanta pincharos mientras dormís y deciros ¡oh! ¡qué bien estás!
Os he visto despertar con legañas y pelos locos.
He fabricado un repertoro de besos, canciones, ritmos y sonidos con el que despertaros cada mañana.
Os he cogido maní ay os he cogido cariño.
He intentado daros gestos de cariño sinceros y reales cuando lo habeis necesitado y cuando no, espero haberlo conseguido.
He echado broncas, no siempre con razón. Soy humana.
Batí el récord de menor horas de sueño por día de toda mi vida.
He intentado que entre todos hagamos de Alex una mejor persona ¿Creeis que hemos conseguido algo?
Me alegro de heber limpiado vuestras lágrimas de pena y de alegría.
He echado de menos a Salomé, Sergio, Luigi y hasta a Eloy y sé que mañana, en el mismo momento que me separe de vosotros pasará lo mismo, Por eso antes de que esto suceda, oso recuerdo que os quiero muuuuuuucho. Un besazo:
Marta monitora diabética, la de Burgos...

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