de mujer a mujer
No terminamos de salir de una crisis qeconómica y nos metemos al límite de una catástrofe nuclear en la que los españoles, mirando para otro lado porque no les toca la mala suerte de los japonenes, se meten en la guerra de Libia, posicionándose a favor de los revolucionarios y en contra de un régimen de un señor que torturaba a gente, y a favor de una potencia universal ¿a qué ton? pues verá usté señor... que nos quitan el petrólo, y en vez de invertir de una vez por todas en energías renovables, que no se acaban, que son eternas, que no contaminan... en lugar de eso... bombardeemos a un país rebelándonos contra un señor y con todo lo que haya por medio.
Nunca he entendido el sentido de las guerras entre los humanos, ni lo pretendo, porque entonces sería una de esas personas corrientes y Dios me libre... nunca he entendido el sentido de una portada que anuncia que mi país como un órgano ejecutor y no el lugar en el que vivo, va a LUCHAR contra el mal, mire usté... porque queremos tener más. Mientras líneas mas abajo Japón sigue luchando contra la catástrofe nuclear que a mí no me toca.
Y para sentirme más persona voy a verte antes de que se acabe el mundo y dejen de existir las oportunidades en las que nos conocemos y hablamos de mujer a mujer sobre el hombre de nuestra vida, de una generación a otra, como si nada más importara, y sólo está sucediendo que somos dos mujeres cuya vida se cruza. Dos mujeres y una tarta de fresa.
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