QUEDAN LEJOS LOS SUEÑOS

Y de repente quedan lejos los sueños, esos que creías más cerca que nunca, ya no les ves ni despuntar. Es porque has bajado la colina. Te encuentras en la falda y desde arriba se veía perfectamente cómo estaban allí puestos en orden todos tus sueños, a donde llegarás algún día, aunque ahora mismo, a la sombra de la colina y a punto de llegar otra noche, no sabes muy bien a cuánto están, ni si no te perderás en la oscuridad y darás un rodeo. Empiezas a temer que fueran una ilusión, sólo un espejismo, o tal vez algunos sueños de otros, los que viste desde la cima hace a penas unos días.
Tendrás que seguir caminando, poco a poco y sin impacientarte. Entretente todo lo que quieras, disfruta del paisaje aun cuando sea árido o tenebroso, disfruta de tu mente y admírate por no cesar en el intento, por seguir paso a paso por el camino. Y si te has cansado para. Esto no es una carrera. Descansa, respira, mira a tu alrededor, pero nunca hacia atrás, y luego continúa. Ten en cuenta que parar no es detenerse, es parar, y antes o después tendrás que seguir adelante, pues nadie caminará tu camino por ti.

Comentarios

Entradas populares de este blog

La de la esquina doblada

cómo se aprecia

Bisolvón antitusivo, el jarabe que más me pone!!